Centro de Madres
Me he sentido inútil y prejuiciosa…
Me falta tanto por vivir y experimentar!!
Adoro ser mujer, admiro la fortaleza femenina, pero hoy más que nunca admiro a la mujer que es madre, esa que se entrega a sus hijos, sin medir consecuencias, esa mujer que deja de serlo por sus hijos.
A mis ciegos ojos los “Centros de Madres” no eran más que un grupo de “cahuín”, pero no... estaba siendo prejuicisa nuevamente al pensar asi... Estos espacios fueron creados con otro motivo mas oculto.... Dichas mujeres empatizan, se dan fuerza, y se animan para luchar con la pesada carga de ser mujeres y madres…
Para mi sorpresa vi a 3 mujeres ver a otra con lagrimas en sus ojos; mi amiga a quien yo debía consolar, pero no sabia como, pues su dolor es desconocido por mi, por mas que intento hacerlo mío, no logro dimensionarlo… ella llora por el sufrimiento de sus hijos, por la impotencia de no ser omnipotente y alejarlos del dolor, a ella no le duele nada, no esta herida, pero llora por lo que sus hijos sienten; y en ese momento de desesperación tres mujeres (compañeras de estudios), sin conocer su pesar y sin siquiera ser amigas le dicen “no sé por que lloras, pero tú te pondrás bien”, y en mi prejuiciosa y egoístamente solo cruza una frase: “que se meten”…
Sin embargo, es algo de otra dimensión lo que las une y sus sutiles pero sabias palabras y la enorme empatia era lo que yo no poseía para animar a mi amiga, pues simplemente yo no soy madre, velo solo por mi, no he tenido que dejar de comer, aguantar humillaciones o miserias solo por ver a mi hijo bien y feliz.
Fuimos por un café, y logramos sonreír y compartir. Cual madres que son, sin proponérselo me han compartido su sabiduría, pero mejor aún logran una carcajada de mi amiga
VIVAN LAS MADRES
Y VIVA LA MIA…
Conchita Figueroa
26.06.10